Mientras la mandamás con su familia se persignaba y le mostraba al Papa un libro cuyo título refiere que “Tlaxcala sí existe”, los pecados de sus nefastos funcionarios, como el de protección civil que venera la trata en su casco, fueron exhibidos en el plano nacional, confirmando que ¡SÍ!, lo que existe es impunidad.
La nueva travesía ahora es por Europa, el pretexto, ni se lo imaginan: promocionar el mundial del voleibol playero y, según sus calenturas, aseguraban que sería recibida por el jefe del Estado Vaticano para entregar el ejemplar de un texto que nos deja ridiculizados. No fueron Cristóbal ni Cortés quienes pusieron en el mapa a nuestro continente y sus provincias, fue la Triste Historia la que descubrió la existencia de Tlaxcala.
Mentirosos, como se caracterizan, recordemos el video tramposo de la semana pasada, la oficina de prensa del gobierno dijo que su patrona “estrechó lazos de amistad y conversó con el Papa Francisco sobre la importancia de preservar y promover la cultura y el patrimonio de Tlaxcala”, la realidad, ella y su parentela, así como miles de fieles, acudieron a la audiencia papal de carácter público que realiza todos los miércoles en la plaza de San Pedro, aunque a diferencia de los simples mortales y turistas, la comitiva pagó muchos euros por asientos VIP que permiten saludar a su santidad y entregarle algún presente como el gigantesco libro que siquiera tocó o cargó.
Pero bueno, más allá del nuevo embuste, la mandamás viajera decidió de nueva cuenta jalar con su parentela, su hija a la que le creó una dependencia y le inventó un cargo supuestamente honorífico formó parte de la peregrinación.
Tampoco podía faltar su pareja sentimental, aunque ninguno de ellos pertenece a la estructura de la administración pública de manera formal, y legalmente están impedidos, usaron recursos públicos, dirán que no, como han respondido a solicitudes de información por anteriores viajes, pero desde que se utiliza el aparato gubernamental para difundir imágenes e información, hay distracción de los recursos públicos.
RUTA 2024
Rumbo a las elecciones del próximo año, a quien le pinta bien el panorama dentro de los morenos es a la diputada Marcela González. Sin hacer tanto ruido cabildeó su ratificación por un segundo periodo como coordinadora parlamentaria y, no solo eso, consensó mantenerse a la cabeza de la Junta de Coordinación y Concertación Política que, en teoría, le correspondía al PRI, donde dos de sus tres legisladores, no dijeron ni pío, solo Blanca Águila se inconformó.
Pero ahí no acaba el asunto, al funcionario que cobra como secretario de Gobierno se le descompuso el panorama nacional ya que la corcholata Adán Augusto no figuró en la encuesta y con ello su sueño de ser senador se le volvió guajiro.
Recordemos que, sin empacho, anduvo promoviéndolo, sus allegados de forma descarada se hicieron presentes en sus eventos en Tlaxcala; por el contrario, al secretario de obras, Alfonso Sánchez García, esposo de Marcela, se le parecen alinear las cosas, ellos están con Claudia Sheinbaum.
Por cierto, mientras al ejecutivo se le acumulan 168 manifestaciones contra su jefa ante su deficiente operación política a cargo de Sergio, en el Congreso, donde comanda la nuera de Sánchez Anaya, las manifestaciones no suman ni una quinta parte, varias de ellas, por cierto, cuando estaba al frente Terán.
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