Por Edgardo Cabrera
La torrecita de vigilancia y el camión espía del C5i que presumen en los grandes eventos circenses de gobierno, simple y sencillamente sirven para tres cosas: como adornos, costosos floreros para las fiestas de la oligarquía gobernante; para justificar el despilfrarro de recursos públicos; y para intimidar a manifestantes. A los hechos nos remitimos.
Ambos artefactos no tienen un costo beneficio para la población, cuando se les ocurre hacer eventotes en el Zócalo capitalino, como ese del voleibol de playero, el tiro con arco, o un desfile cívico, van y colocan el camión espía frente a los portales para que lo vean, vale decir, en una zona plagada de cámaras del gobierno estatal y municipal, así como de particulares.
Su reciente adquisición está en la opacidad, quizá por el moche para succionarle más al erario, se trata de una torrecita espía, también la presumen, por ejemplo, en los partidos de fútbol de los casi extintos Coyotes (ya también los vendieron), o la feria de Tlaxcala, donde vale decir, nunca sirvió para detectar y prevenir el ingreso de armas de fuego.
Rercordemos a un par de chamacos poblanos que fueron más hábiles que la seguridad del recinto, la torre espía y los guaruras de los politiquillos que se iban a embriagar cotidianamente. En medio de todos ellos y en plena juerga, sacaron pistola y echaron tiros, pero no fue lo único, recordemos las decenas de incidentes que ocultaron para no balconear sus deficiencias, descomposturas de juegos mecánicos, golpizas en el palenque, atracos adentro y fuera, en fin.
Por qué no colocan ambos juguetes en zonas rojas, por ejemplo aledaños al Arco Norte (Sanctourum y Calpulalpan) donde los atracos son la constante; o en la Vía Corta a la altura de San Pablo del Monte donde se les “cuelan” los malandros, dice el gobierno, para tirar cuerpos… no cabe duda, es el precio de tener también a un psicólogo charlatan, ex colaborador de Pepillo Origel, al frente de áreas de seguridad, como el otro al que le atracan sus negocios.
MISERABLES
Durante la entrega del paquete presupuestal, y a pregunta expresa, el secretario de Finanzas reveló que la nueva Secretaría de la Mujer tendrá recursos por 20 millones de pesos, al revisar el documento entregado al Congreso se comprobó que plantean darle 20.2 mdp, ¡vaya descaro!, se trata, una vez más, de un embuste, resulta que los prometidos 18 millones de pesos del casi extinto Instituto para Robar más al Pueblo no se destinarán a dicha dependencia como lo prometieron.
Vamos a los números, este año el Instituto de la Mujer ejerce 16.1 millones de pesos, y como parte de las obligaciones adquiridas por el estado por la Alerta de Violencia de Género decretada para Tlaxcala, deben elevar de rango dicha instancia, no se trata de una graciosa concesión, tampoco de un tema de voluntad.
Ahora bien, como dijimos al principio, justificaron desaparecer una dependencia para crear otra, la lógica elemental nos lleva a concluir que esos recursos que ejercen se suman, 18 millones más 16 nos dan 34 millones de presupuesto para 2025.
¡Pero no!, quieren dotarle 20 millones, solo cuatro mas. A la bolsa de quién pararán los 14 millones de pesos sobrantes… esa es la pregunta.
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